lunes, 27 de septiembre de 2010

Madre a la fuga

No me esperaba con su mejor cara.
Prematuramente oscura, sólo acompañan  farolas que dejan  una luz anaranjada y llenan de sospechas cada esquina.
Un ambiente adecuado para escribir sobre emboscadas y misteriosos sucesos entre "palazzos".
La maleta se atasca en los socavones llenos de agua, huele a gato mojado y "pichum" variado.
Aquí estás, adorada Roma.

Anochece de repente, y el Tiber  que parece no moverse, como un lodazal gris verdoso, se llena con los destellos de la luna mofletuda.
Me gusta cruzar los puentes, que cosen la vida de la ciudad entera como puntadas  sobre un descosido.

Por unos días vivo una vida con costumbres que no son mías: madre suelta, sin otro horario que el propio, sin más hambres que las que yo sienta...es una circunstancia tan desconocida...

Respirando tanta historia entre estas calles, compartiendo-contrastando conocimientos con otros mucho más sabios, siento la tentación de una fuga hacia esta vida de solitario desmadre...nunca mejor dicho...

Ah! Pero aparece MiGeorge, caballero andante, que me trae de vuelta, y descubro que lo mejor de la fuga ha sido encontrar al regreso vuestros besos.


14 comentarios:

Ana, princesa del guisante dijo...

¡Bienvenida, Mater! Se te ha echado mucho de menos. Y me ha encantado tu descripción de esa Roma que yo sigo sin conocer (no tengo perdón).

Feliz regreso, llénate de besos de los tuyos y de abrazos virtuales.

Pablo dijo...

Guau!!!! se me ha puuesto la carne de gallina con lo de lo mejor es la vuelta...

Muy bien descrita esa sensación de más hambres que las mías y tal.. bienvenida a estudiar fuera de casa!!! jeje
un besote enooorme madre!!!

Modestino dijo...

Sí, lo mejor es la vuelta. Bienvenida¡¡¡¡

lolo dijo...

Hey, Mater! Habrás escrito, entonces...
Aunque comprendo lo de la vuelta, fugarse está bien, de vez en cuando. El hambre al ritmo propio y los horarios libres tienen pero que muchísimo encanto, no me digas. Además de los puentes, claro.
Me alegra mucho que vuelvas, notaba la ausencia de tu cordura.

Marta piesdescalzos dijo...

Arrivederci Materalafuga! aunque quizá no con su mejor cara, la citá es la citá siempre. ¡Sin otro horario que el propio, sin más hambre que la tuya...! maravilloso desmadre con feliz end YourGeorge.Bacio

sunsi dijo...

Mater...Aleluya. Qué bonita la descripción. Y cómo te tira la tropa ... Se te echa de menos, ¿eh? Me ha hecho gracia lolo con el tema de la cordura.;)

Me alegro de tu escapada...y de tu vuelta.

Un beso, Mariapi.

Mariapi dijo...

Ana, es imposible tan siquiera intentar la descripción de Roma...es mucha Roma, son muchas Romas...tienes que verla, te atrapará, porque es una ciudad que nunca cansa, y siempre parece nuevo lo ya visto.
Me ofrezco de canguro...
Gracias, gusta mucho que te echen de menos... un besote.

Mariapi dijo...

Pablo, es que nada hay mejor que vosotros...
Estudiar fuera de casa...¡y os quejaréis! Lo he pasado genial, y conste que he estudiado MUCHISIMO, no como otros, un abrazo gordote, de madre que regresa.

Mariapi dijo...

Gracias, Modestino. Despejarse un poco por esos mundos de Dios, te hace ver com mayor amplitud la realidad cotidiana.
Gracias mil por tu bienvenida, es un honor el reencuentro.

Mariapi dijo...

Lolo, fugarse está más que bien...debería ser obligatorio por prescripción facultativa. Es maravillosa la fuga en si misma, con sus aromas de libertad bohemia, y también porque ese pequeño distanciamiento y cambio, rejuvenece lo cotidiano.

No he escrito mucho, tan sólo alguna nota suelta. Necesitaba invertir el tiempo que quedaba libre en impregnarme de colores, olores, sensaciones... me gustaría poder contaros...

Gracias por recordarme, Lolo, es un gran honor.

Mariapi dijo...

Marta, creo que uno de los encantos de la citá es precisamente que puede permitirse mostrar "mala cara", y continuar siendo hechizadora...¿qué haríamos sin sus socavones, sin esa suciedad milenaria, sin los adoquines descolocados, sin esos transportes que nunca llegan...sin ese modo descarado y chulesco de ser ? Precisamente por ser también así, Roma me encanta.
Uno bacione, Marta.

Mariapi dijo...

Sunsi, si fuese posible, me gustaría compartiros tanto de bueno y bello como tiene Roma, y que me cautiva cada vez que vuelvo.
Reconozco que cuando estoy allí, la tentación de fuga es muy muy fuerte, pero "la tropa"...si, tira mucho, y el reencuentro es mucho mejor que todas las ciudades del mundo¿verdad?
Misterios de la maternidad.

Gracias, Sunsi,un abrazo bien gordo.

mOnTy @holasomos7 dijo...

Mater, te esperaba en la puerta, ahí sentadica. Me alegro de tu escapada y de tu regreso.
Facultativa, firmada y con letra legible: si es dos manzanas más abajo o dos ciudades más arriba no importa.

De la Roma recuerdo belleza, caos y por entonces todas las piedrras grises, muy grises. Me gustará leerte. Un abrazo!

Mariapi dijo...

Monty, a ver si encontramos a esos médicos que recetan huídas depejantes...auqnue sea a la esquina, tienes razón.
Roma sigue con sus piedras, algunas recientemente restauradas, y otras con esa maravillosa suciedad negruzca de los años,y millones de hombres viviendo y respirándolas.

Un abrazo, mil gracias.