miércoles, 24 de marzo de 2010

Amazing Grace


Mis chicos pensarán que es "otra mami-serie" de la BBC, pero no os dejéis engañar por la carátula.  
"Amazing Grace",  buen cine que hace pensar. 

"...almas humanas encadenadas, navegando como mercancía de carga".

El mercado de esclavos no era escandaloso para los hombres de bien. Hombres y mujeres buenos, pero con los ojos cerrados. Con la conciencia tranquila, convivían con otros hombres que sistemáticamente eran vejados,  sin considerarlos humanos. Sin maldad ni odio. Ni siquiera indiferencia.

Lo inmoral y provocador era la postura de Wilberforce.

Sólo han pasado 200 años, y nos parece incomprensible esa ceguera. Pero padecemos otras oscuridades. 

Paseo por  la historia, para comprender bien el presente, y está llena de otros ofuscamientos: ignorancia e indiferencia.

Porque hoy también, con buenas intenciones, discursos llenos de buenismo y exaltación de sentimientos, apelando a una "vida más humana" en la que no haya sufrimiento, permitimos con nuestra apatía el desprecio por la vida en sus formas más débiles. Nasciturus, niños, viejos, desahuciados. Parecen inútiles, no entendemos sus dolores, no damos sentido a su respirar. 

Resulta paradójico, pero lo inmoral y provocador ahora es defender la dignidad y el valor de esas vidas. Desde su concepción hasta la muerte natural.

Casi veinte años duró la batalla en el Parlamento inglés para conseguir la abolición del mercado de esclavos. 

Venció un hombre que puso el sentido de su existencia por encima de las conveniencias, de las correcciones. 

Un hombre que gastó su vida por otras vidas utilizando la inteligencia, la astucia, el coraje. 

Un hombre que reconoció el poder de esa "Amazing Grace " para hacer recapacitar y cambiar los corazones.


7 comentarios:

ana dijo...

Es una lucha más por aquellos que aún no tienen voz... pero que son, íntegramente.

Un saludo.

Pablo dijo...

Es una película sensacional y tremendamente animante: unos pocos consiguen que la cultura occidental vea como algo perverso la esclavitud (al menos en teoría). Ahora nos toca que la "cultura" entienda que eso que es tan progre: ABORTO, es una aberración. Y se puede conseguir. Sé que todo esto suena fuerte. No voy contra nadie sino a favor de muchos. Pero se puede, estoy absolutamente convencido... no digo que sea fácil.

sunsi dijo...

Mariapi...¿Cómo, con qué título o epígrafe de libro de Ciencias Sociales pasaremos a la Historia?
Bingo. La esclavitud. Un paralelismo que le falta ...nada para ser casi idéntico a los tiempos actuales.
Me cuesta y me duele pensar que puede llegar un momento en el que convivamos con la cultura de la muerte, apartando lo que no consideremos "útil" como si fuera un fardo... sin mover una pestaña.
Dios nos libre de acabar con un corazón de piedra que no sea capaz de conmoverse, de tener misericordia.

Gracias, mater. Estupenda entrada.
Bssssssssssssssssssssssssssssssssss

Mª Pilar dijo...

Sí, Ana, esa me parece la clave: comprender que son. De modo absoluto. Y que su valor está en eso, no en su utilidad o condiciones. Un abrazo, y gracias.

Mª Pilar dijo...

Pablo, es el aborto y también otras muchas brechas que hemos dejado abrir, los procesos por "wrongful life", la eutanasia, y en definitiva la mirada de desprecio hacia toda vida que no aparezca dentro de lo que se considera "útil" o con la suficiente calidad de vida. Me anima la seguridad de que el ansia de Verdad que todos tenemos, nos hará contemplar otra vez la vida, cualquier vida con el asombro necesario ante lo sagrado.

Mª Pilar dijo...

Sunsi, por eso me parece tan interesante la película: está llena de esperanza, Desprende seguridad en que "lo mejor " es posible. La clave, para no acostumbrarnos a lo inhumano, para deshelar los corazones y curar cegueras, contar con esa "Amazing Grace"

Pablo dijo...

Como "doctorsito" puedo afirmar que sí, son e integramente.
No entiendo como puede haber gente de ciencia, ¡médicos! capaces de negar la vida a los más vivos. Tantos cambios en tan solo 9 meses...
Si alguien no es útil... mátalo. Eso es que las personas ya no importan.