Cuando iniciamos con ilusión proyectos, y retomamos algunos sueños que habíamos abandonado.
Ahora es el mejor tiempo para aprender a mirar, a respirar, a sonreir, a llorar, a acariciar y besar ... como la primera vez.
Aprendiendo a vivir.
Como estos recién nacidos, todavía hinchados por el empeño del parto, con la piel arrugada y manchada por la laboriosidad de los nueve meses de claustro.
Maravillosa vida nueva.
Fotografías de Thierry Bouet.
15 comentarios:
Puedo recordar con claridad el olor de los niños cuando acababan de salir de dentro de mi cuerpo... me han impresionado las fotos, y tus palabras. Un abrazo
Como la primera vez, Máter.Es lo más bonito cuando ya vas por la décima o la decimo quinta. Como la primera vez. Como vuando siempre era todo nuevo y la ilusión estaba intacta.
Gracias,Máter. Que pareces pitonisa...;-)))
La vida es algo maravilloso. Me han encantado las fotos! Reflejan y proyectan vida, y felicidad. Y la felicidad es algo que necesitamos todos.
cuanta ternura me despiertan!
Ana, ése primer instante de contemplación, con todos los sentidos abiertos, es inolvidable. Tengo las instantaneas de mis hijos grabadas en el alma. Es la ternura infinita del "nosotros" hecho un ovillito tierno y templado, junto con la dureza del vivir: sangre y lágrimas.
A mi también me impresionaron mucho las fotos.
Toda la obra de este fotógrafo es especial, con un contraste de ironía.
www.thierrybouet.com
Un besico
Sunsi...¡cómo necesitamos recordar, reinventar ésa primera vez...! Volver a ser como éstos niños que abren sus pulmones en el primer suspiro, que con dificultad aprenden a abrir los ojos...y lo hacen desde el primer segundo, luchando...como nosotras¿verdad?
No, no soy pitonisa...es cosa de ser "gemelas"jajajaja
Un abrazo.
TC, sí, son fotos de la vida, con toda la fuerza que esta tiene, en algo tan diminuto e indefenso como es un recién nacido...Me ha hecho pensar tu alusión a la felicidad...que todos buscamos y necesitamos...y tienes razón, estos "neonatos", que no tienen la belleza redonda del bebé mofletudo, con sus arrugas, aún deformados por el parto, son la mejor imagen de la felicidad, que también nos suele llegar así, después de un largo "parto"...
Un abrazo, gracias por venir.
Marta, desde que las descubrí, he vuelto una y otra vez a contemplarlas...me atrapan...
Un baccio, ciao bella!
Primorosa vida!!!
Yo recuerdo perfectamente a mi princesa, mezcla del tercero y el cuarto. Sólo abrió los ojos al oír mi voz, luego, plácidamente y con una estupenda mediosonrisa los cerró. No los volvió abrir. Claramente se podía observar que para ella, el mundo, ERA EL SUYO (por lo visto ya venía con una luna puesta en su cabecita, toda una luna que estaba por descubrir y que la ha mantenido siempre tan ocupadita... estaba visto, el mundo, tendría que esperar).
Puedo confirmar que eso parecía, y que así ha sido. Sonreía, la condenada... con los ojitos cerrados a cal y canto, ojitos orientales, rasgados y profundos. Ainssss... perdón, es la emoción.
Preciosas las fotos. Y oye... yo desde ahora rezo por la madre del segundo... ufff... sale ya con los ojos abiertos y sacándole la lengua al mundo. No quiero ni pensar en lo que transcurrió después... jajajaja. Y el primero, ojo al dato, que el disgusto que porta por haber sido colocado en este mundo le durará, si no toda la vida, sí los primeros cincuenta años...
Desde luego, mira que son expresivos los rostros ya desde el primer día... oye.
Septiembre tiene ese puntito de primera vez en casi todo. El primer abrazo arrullado es lo que más recuerdo. Un beso..
Buenas tardes matermani!
...mis recuerdos serán muy, distintos a los vuestros y siempre será así (paso del tópico de que os envidio). M. nació ayudada del "forceps" con la carita estirada como un pepino...pero hasta que no pasaron los días, y vimos esas fotografías (se revelaban entonces), ni tan siquiera me di cuenta de de ello... el resto de sensaciones las cuento allí:
http://comolaprincesadelguisante.blogspot.com/2010/09/no-se-parecen.html#comments
Un abrazo!
Ana, es verdad, en ése primer instante muestran mucho de quien son, en ésa mezcla de "viejitos-reción nacidos". Dichosa tu niña, que desde el primer momento ya sabía mirar por dentro.
Un besico, a las dos.
Tomae, es una gran ventaja que los padres tengan "otras" sensaciones"que las madres...ser distintos es una gran riqueza, no creo que implique "desigualdad" en sentido peyorativo alguno.
Y junto al rostro de cada uno de mis hijos en el momento de nacer, siempre recuerdo el de mi marido, entre desencajado y extasiado...y así sigue cuando los mira...aunque se haga el duro.
Un abrazo, un besico a tus Princesas.
Monty, septiembre es para muchos el auténtico "añonuevo". Planes, proyectos, el cole...lo difícil es estrenar miradas, "resetear el corazón" para que vuelva a notar "la novedad" que cada uno somos...como ése primer abrazo que cuentas.
Un abrazo, gracias.
Me ha emocionado tu entrada, Mariapi. Esa primera vez, el primer momento, el primer llanto, la carita... no se te olvida en la vida. Y cada vez es diferente, ¿verdad?
Fantásticas fotografías. Me quedo con la primera para mi chico mayor y con la segunda para el peque que le va que ni pintada.
Un beso. Buen finde
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