lunes, 30 de noviembre de 2009

El Circo de la Mariposa

Lady Poto me invitó a un link que os ofrezco.

A nadie os parece demasiado extraño que llore, pero a vosotros duros pedernales, os reto a mantener los ojos secos.

Tiene el mismo color y aromas que mi circo imaginado.

http://www.youtube.com/watch?v=9582NStUdqU


http://www.youtube.com/watch?v=BUBPX28_mAE&NR=1

viernes, 27 de noviembre de 2009

Teatro Chino

Corrían los años 70 de mi adolescencia. Aunque no lo parezca, también fui adolescente, con granos y soñadora.

Por aquellos tiempos de cambios, propios y patrios, aparecieron carteles que anunciaban con letras rojas sobre unas fotografías en blanco y negro de vedettes rubioxigenadas, de medio pelo y mucha pluma: ”Teatro Chino Manolita Chen”. Después he sabido que no era china, sino de Cádiz, y encima no era Manolita, sino Manolo. Pero en los 70 eso, gracias a Dios, ni lo podíamos sospechar.

Los circos siempre me producen melancolía. Pensar en una china, aquí, tan lejos de sus pagodas, viviendo en un circo fue detonante para mi imaginación. 

Espoleada por las descripciones de Pearl S Buk, presentía a la desgraciada china atisbando con sus ojitos lineales, mientras el domador de leones vivía historias de amor no correspondido con la  contorsionista, que con las piernas enrolladas en el cuello, bebía los vientos por el malabarista, viudo de una pobre equilibrista que se partió la crisma de un traspiés en una actuación ante el mismísimo Emperador Reza Palhevi…porque sí, se me iba la olla. Y juro por la cobertura de mi móvil, que era capaz de oler inclusive los tufillos de aquel circo chino imaginario: el sudor del trapecista, siempre innovando nuevos saltos al vacío, las “tortas” de los elefantes, el serrín entre los tigres, los trajes churretosos, el vino para olvidar. (En fin, que a mi el circo me da mal rollo)

Y en medio de los carromatos descoloridos y esa aridez monótona de vida circense, esta ella: Manolita Chen, la vedette. Todos los focos en sus plumas, llameando las desmesuradas lentejuelas , pares de cienes y cienes de ojos…(bueno, el ojo suelto de algún tuerto también miraría) … pues eso, todos expectantes en ella. Una chinita, que a pesar de sus pies vendados se subía a unos tacones, y bajaba las escaleras de purpurina.


Después, la experiencia de la vida me ha hecho comprender la enseñanza que encierra el enigma de Manolita Chen. En toda familia que se precie, la vida viene presidida por este insondable misterio. 

La mayoría de peleas entre hermanos, que son sin duda la salsa de la vida, pero que dan tanto quehacer cuando pasas a ser  madre, vienen del  conflicto “Manolita Chen”. 

TODOS queremos ser en exclusiva la vedette,  encumbrados en nuestros tacones, bamboleando una boa de plumas verdes, centrar la mirada expectante de nuestros padres.

No sabría explicar el porqué. Lo  curioso es que en una familia ese protagonismo único se hace posible de modo simultaneo. Las madres no tenemos media docena de hijos: siempre son seis hijos únicos, seis vedettes, aunque no sean chinos ni se llamen  “manolitachen”. 


martes, 24 de noviembre de 2009

Iustitia versus Charitas

A quien le toca?... A mí no me toca... ¿A quién le toca? …
Facebook: Yo también soy fan de ” a mí no me toca”…

Porque si ese vaso olvidado en la encimera es de la cena… a mí no me toca, que yo empiezo con los del desayuno.  Ahí se queda, tres meses, que a nadie le toca.
Y ayer ya saqué al perro. Que se muera el perro, que a mí no me toca.

La efectividad del sistema de encargos hace trizas la Cáritas.  El riesgo del  “encargo libre” es que hay mucho “caritas”.

Dicen que para que un matrimonio funcione, hace falta UN tonto... Para que sea feliz…DOS tontos.

Reivindico “A mí también me toca”. Siempre, a todos, nos toca.


lunes, 23 de noviembre de 2009

Amarillismo

Ante las amenazas sufridas por grupos descontrolados de matermaníacos, que al más puro estilo "un tuto o la muete" pretenden difundir bulos sobre mi persona si no subo una entrada diaria a Matermanías, me veo obligada a hacer el siguiente comunicado de prensa.

Todo son falsas acusaciones. La presión mediática es enorme, y me veo sumida en un estado de ansiedad como el de la Belén"¿Mentiendesss?".
Mis fieles seguidores saben que todo lo debo a mi público, y en cuanto me reponga del stress o scuatro, volveré a publicar. Todo está en manos de mis abogados.

P.D. No tenemos "itnelness" en el Mac.

sábado, 21 de noviembre de 2009

Fiesta




Nunca nos cansamos de mirar a quien queremos. Miramos con sonrisa boba a nuestro bebé dormido, y a escondidas, sin que pueda darse cuenta, a nuestro “aborrescente” absorto en su música, a nuestra madre cabeceando después de comer. 

Es un mirar que traspasa la imagen, llega al centro del mirado sin otro mensaje que confirmar "es bueno que existas". No busca nada más. 

Llegamos al Portillón, miramos en silencio. Llegar ha necesitado esfuerzo, tiempo, dejarnos algunos jirones en los peñascos. Nubes en los pies, y el Aneto en el cielo.  Mirando así nos sosegamos. Pueden pasar horas sin aburrimiento, sin nada más que hacer. Igual que cuando los novios nos miramos a los ojos. Mirar así descansa.

Nunca nos cansamos de ver en los ojos de quien amamos. 

A menudo olvidamos que esa es una forma de querer: CONTEMPLAR.

Contemplar es un modo de mimar, de celebrar al otro, de preferirlo. Es un embeleso sin prisas, requiere tiempo, necesita toda nuestra atención. No se improvisa.

Eso es una Fiesta, descansar un rato juntos, contemplándonos.


 Celebramos al cumpleañero, que escoge para ese día su menú preferido, le cantamos, y se pone una corona.

Contemplamos y homenajeamos al que aprueba, la goleada, la puyada a Liri… el aniversario, el santo, el domingo.

Banqueteamos, cantamos, aplaudimos y brindamos.

Buscamos el mejor nosotros para ofrecerlo.

…es que estoy buscando menús para Navidad. Fiesta. Contemplamos como nace Dios.



                                             ¡Y qué contempladicos os tengo!


                                         

jueves, 19 de noviembre de 2009

Mantas con Mangas



Como los tres mosqueteros, tres gracias de primavera o tres tristes tigres, hemos cruzado el Tibidabo y enfilado Pau Clarís en el bólido de Tía. Milagrosamente, hemos llegado. Objetivo: Ribes y Casals.

La tentación era fuerte, pero dignas y aguerridas, hemos resistido.. Y eso que tía tenía momentos de debilidad "…pues se las ponemos a los abuelitos.. y dicen que van muy bien en pisos de estudiantes…poca broma…”.

Pero, NO.  


Honorabilidad , pundonor y decencia lo impiden . Os quedáis sin las mantas con mangas que anuncian en la tele.


¿Os imagináis 25 mantas-mangas brindando en Nochebuena? Bien mirado, así podríamos cantar Gospel. Calenticos.



miércoles, 18 de noviembre de 2009

¿QUÉ ME PONGOOO?


De generación en generación, éste ha sido un grito de súplica, una llamada de auxilio entre las portadoras de cromosomas XX.

Tiene algunas variedades como:”No tengo nada que ponerme”, o “Siempre me pongo lo mismo”, pero todas ellas reflejan el drama de la condición femenina.

En el ámbito familiar, sólo mi madre se ha librado de esta plaga. Nunca le he oído este lamento. Pero todas las demás  clamamos  e imploramos compasión al grito de ¿Qué me pongooo?

En el ciclo vital femenino hay momentos críticos en los que esta dolencia se intensifica: Entre los 15 y los 50. Entonces no bastan ni las ocho plantas del Corteinglés, ni los zaras y mássimos juntos…¡qué desasosiego  produce este bramido! ¡Qué soledad íntima abrir el armario y comprobar que, una vez más, NO SE QUÉ PONERRRME!

 En plena crisis, a la paciente(más bien impaciente) no hay nada que la calme: “Pues ponte….”  “NO, NO Y NO”, es la única respuesta que puede dar la afectada.

 Es  un campo que nadie ha investigado y animo a futuras biólogas, como “MissG” a trabajar en ello: “Localización en el Telónemo Izquierdo del Sídrome Quemepongo”. Bonito tema para una tesis…

Os dejo una imagen del Teddy Bear de “LaFlipa”, que finalmente encontró qué ponerse.


martes, 17 de noviembre de 2009

DIGNISÍSSMOS





Recibo un S.O.S. de “laFlipa”(o “MissG”, si nos ponemos en plan Austen). Plantea un jeroglífico antropológico: ¿Todos los hombres somos personas? Ossea… ¿es tan ser humano mi vecino como yo? Y aún más ¿vale tanto como yo?. Adjunta documentación, y parece como que enseguida queda claro.  “Ofcors”.


Si hasta hay una Declaración de Derechos , que empieza tal que así: “Considerando que la libertad, la justicia y la paz en el mundo tienen por base el reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la familia humana”. Claaaro. Es así de sencillo y claro, claro…Dignidad intrínseca, Familia humana.


Y en la distancia parece hasta un poco ganas de enredar del profe peguntar si todos somos personas… salgo de casa, rumiando sobre qué contestar a “MissG”, si es todo tan prístino.


Hay atasco. El del coche de al lado, mientras descarga la rotonda, se mete el índice en la napia hasta el mismo nudillo, en busca del moco perdido…Hombre…muy digno, muy digno no me parece…y una misma en su cuerpo-humano-persona, reconozco que rascarme el oído con la aguja de hacer punto mientras veo CSI, tampoco es así como mucha manifestación de dignidad…por no entrar en mayores. Primera duda ¿somos dignos aunque no actuemos dignamente? Pues va a ser que sí, pero ¿por qué?


Una vez en los ferrocatas, desde la plataforma, entro en un anuncio de Benetton:  moricos, chinorris, y suramericanos, los rastas de “La Floresta”… entra en Las Planas el rumano con su acordeón, la piji “qua parla amb la A” en Sarriá… Y ahí estamos todos en real y de cerca, que sudamos, tosemos y olemos, no con el brillo y magia del National Geografic. 
No parecemos nada iguales, y dan ganas de decir: ”Oiga.. que aún hay clases”. Debe ser el día, está nublado, pero mucha "dignidad-ígualitaria" no me parece.


Reconocer la dignidad. Para ser real, para no depender de si se la merece o no, si lo veo hoy o mañana...¿no implica que Alguien, ni yo ni el otro, ha tenido que darla?


Me propongo repetir, como un mantra, para que no “meseolvide”: “DIGNISÍSSMOS, DIGNISÍSSMOS, DIGNISÍSSMOS…” al más puro estilo de Lanaja.


domingo, 15 de noviembre de 2009

Oh la lá, La France!

“Con mi chandal y mis tacones, arreglá pero informal, el sábado por la mañana él me saca a pasear…”

Lo del chandal y demás no es verídico, simplemente me atusé las rastas, pero ayer “MiGeorge”, (o mejor, mejor , como dice Pedrito )“MiJaques”, me sacó a paseo. Y así “to tieso-to tieso” por la A7, llegamos a la France, en una de esas incursiones de tipo “vida matrimonio sin hijos”, que tanto envidia mi hermana. Perpignan (ni cines ni acuerdos raros).

Oh la lá! En medio de la rue, con una banda de jazz que jouait la musique, viendo acercarse a “MiGeorge”, caballero español, creí estar dentro de un fotograma de “Amelie”.

La Grandeur se desparrama desde Paris hasta el sud.

Vive la politesse, le rendevous, la gourmandisse… el té a las cinco, la pala de pescado, los cubiertos de postre,  LA CIVILIZACIÓN.

¡Gracias Dios mío por hacernos tan “excedentes”! Por permitir que los hombres, admitiendo como tales a los franceses, seamos capaces de crear tanta belleza, y sacar del instinto de supervivencia, (angrucia , desnudez, búsqueda de cobijo), la cuissine, la mode, la decor.

Oh la lá, Lulú se mua!

sábado, 14 de noviembre de 2009

"La Charlas": Madre antisistema

Que un domingo cualquiera, entre el pollo y el postre, te descubran que eres una madre antisistema, descoloca.

Asumir así, "desupetó" una nueva identidad, deja desasistido, conmociona el orbe maternal. Sería como si "MiGeorge" me escribiese un poema: una bomba en la esfera de valores y criterios. O como si el abuelito, mientras poda tranquilamente el olivo, me descerrajara "eres adoptada". Un descubrimiento así cambia muchas cosas y obliga a reflexionar sobre las identidades íntimas.

Madre antisistema, y encima con un alias que desconocía: "La Charlas". ¡GLUB!.

Autoimagen destruida: señora mediana edad, que se tiene por conservadora, moderada, casera, fan incondicional de las series de la BBC... nada, imagen hecha añicos(con mis añicos...) Y aparece en el espejo de las maternidades una señora con rastas ideológicas, piercings culinarios, pantalones "cagaos" y bufanda alternativa. Desgañitada en las barricadas de lo profundo, incendiando los contenedores de las medias verdades. Muy fuerrrrte. Una madre antisistema.

Pues Miguelón lo descargó sin apuntar siquiera, pero el golpe llegó directo al corazón, para después subir y agitar el cerebro.

Y una vez aceptado, me gusta.

viernes, 13 de noviembre de 2009

Pablo hace Bechamel.

Y sin grumos. Toda una lección de "gourmandisse". Un hecho tan insólito ha resuelto dudas existenciales que no me dejaban dormir: Los grandes ideales...¿son sólo cosas de mujeres y curas? La bechamel de Pablo me hace pensar que NO. Otro rato lo desgloso.
¡Ah! Y después ofreció calamares. Un detallazo.

Nota: Pablo no tiene Thermomix. Es un dato imprescindible. Con nuestra querida Termo, la cosa cambia un poco. pipipipiiii-pipipipiii-pipipipiii.