martes, 23 de noviembre de 2010

Nativos interactivos

Estoy leyendo un interesantísimo trabajo sobre sobre la "generación interactiva":  Nietos del 68 "prohibido prohibir", con unos padres que posibilitamos  el "consume para ser feliz". Son hijos de la web 2.0.

Esta generación de nativos interactivos tienen la necesidad de estar constantemente conectados, han desarrollado un nuevo modo de enfrentarse a los problemas y necesidades: cualquier persona en el mundo puede resolvérselos o satisfacerlas con la única condición de estar conectada a internet.

Los padres y profesores dejamos de ser la única fuente de conocimiento, con la erosión que esto puede conllevar en el tema de la autoridad...

No sólo son consumidores , sino que dominan los medios de producción digital, son "prosumidores".

Tienen mucha facilidad para procesar información rápidamente, pero les cuesta reflexionar sobre sus actitudes y conductas, necesitan una recompensa inmediata, y tienen una atención diversificada, capaces de realizar varias tareas de forma simultanea.

Su inteligencia visual está muy desarrollada: el texto les sirve para ilustrar la imagen.

Crecen de un modo diferente: queman etapas muy rápidamente, pero siguen conservando muchos rasgos de su etapa infantil. Acertadamente se les define como "entes autónomos con gran capacidad de decisión". 

Más que nunca me parece acertada la concepción de las relaciones familiares como "emigrantes intergeneracionales", como ya he comentado.

Los padres no  pasamos de ser "Migrantes digitales", aunque logremos "nacionalizarnos" en el mundo digital e interactivo nos quedan rasgos de nuestro origen.

Creo que el esfuerzo de adaptación compensa con una mayor cercanía y comprensión de la generación de estos "nativos interactivos", mis hijos. 

Pero a veces tengo la sensación de que Interntet está cambiando mi modo de pensar, el funcionamiento de los circuitos neuronales. Está socavando mi  capacidad de concentración y contemplación.

Providencialmente, para desestresarme, he encontrado este tesoro...en la dichosa internet. En las antípodas de la  web 2.0.
Un antídoto, con poderes balsámicos: Once minutos de belleza, bondad y sabiduría.


El tiempo al tiempo from Once Upon a Time on Vimeo.

13 comentarios:

sunsi dijo...

Querida Mariapi. Gracias por el post y el vídeo. Tengo que asimilarlo todavía. Fundamentalmente el vídeo. Dice tantas cosas este anciano relojero...que creo necesitaré verlo varias veces. De momento me quedo con interrogantes. ¿Qué es realmente el tiempo? ¿Para qué sirve contarlo? ¿Es necesaria la precisión... que todos los relojes estén coordinados? ¿Hemos terminado siendo sus esclavos?

Muchas gracias, Mater. Un besico

Pablo dijo...

que gran verdad!!! las nuevas generaciones necesitamos estar conectados!!!!

Ana, princesa del guisante dijo...

Hoy nos hemos causado lágrimas mútuamente...
Mi abuelo fue relojero. Y con 80 años se compró un ordenador, y aprendió a utilizar internet.

Ahora que sus horas se desgranan poco a poco en el camino de vuelta, yo añoro el tic tac de los numerosos relojes de su casa.
Un besico

Guayen dijo...

necesitamos estar conectados para poder visitar el blog de matermanias!!!!es FUNDAMENTAL!

lolo dijo...

Algo sí que se pierde. Pero también se encuentra mucho. A esta maravilla de hombre, por ejemplo. Me quedo con dos frases: "Es tiempo que se pierde" y "La quería".

Gracias, Mariapi. Han sido doce minutos sin tiempo. Y me ha encantado la fotografía.

Una emigrante sin idiomas.

Mariapi dijo...

Sunsi, creo que las preguntas que sugieres son tan interesantes como el video...dan para llenar miles de entradas, o cientos de blogs.
A mi me serena este testimonio de la sencilla grandiosidad humana: creados para el bien y la belleza, no hace falta más que escuchar a Emilio, el relojero.
Gracias, Sunsi, siempre aguijoneando, siempre tan capaz de espolear el pensamiento...de oficio.

Mariapi dijo...

Bueno, Pablo...¿te quejarás tu de conexiones, eh? Que me has dejado al ganadico con unas envidias...Un appel-kiss.

Mariapi dijo...

Ana, espero y deseo que esos recuerden, aunque lleven alguna lagrimica, te hayan dejado la dulzura de los buenos ratos que seguro has tenido con tu abuelo relojero...una profesión, que estoy segura imprime caracter¿verdad? Un besico.

Mariapi dijo...

¡Ay, Guayentona! Mira que eres pelotaaa...si, conectada al feisbuc y demás zarandajas...Un besote, chiquitina.

Mariapi dijo...

Lolo, eso de sin idiomas...no me lo acabo de creer...
A mi también me ha llegado al corazón el quiebro de la voz en "La quería"...y la generosidad de entregarse enseñando sin cicatería...
Cuántos modos de encontrar belleza...Gracias.

ana dijo...

Belleza, bondad y sabiduría.

Y me pregunto... por qué se las deja tan solas? ¿Por qué tengo la sensación de que a su lado habita una soledad interminable?

Me duele mucho la soledad de esta sabiduría, su no comunicación con el mundo. El mundo recibiría un todo con su sola presencia.

Un olé por quien lo encontró y nos le dejó en esta aldea global. Es algo precioso. Y sin embargo... sigue ahí, la sensación de soledad. Es un hombre muy solo. Y poderoso.

¿Cómo poder delvelverle algo a esa sabiduría? ¿Algo tan sencillo como un saludo lleno de gratitud por su sóla presencia en el mundo?

Mariapi dijo...

Ana, no creo que estén "solas"...es que no se les hace mucha publicidad...pero hay mucha bondad, belleza y sabiduría, hay que saber mirar...anda busca un espejo y asoma la carica.

Un besico.

ana dijo...

No sé, Mater... a mí se me ha quedado un nudo después de mirar a esos ojos... Si transcendemos, claro que no están solas. Pero esos ojos... esos ojos sí lo están. No puedo evitar pensarlo.

Un abrazo.